jueves, 6 de noviembre de 2008

El Valor de la VejeZ

Todo, en cuanto pasa el tiempo le subimos su valor, los vinos, el queso, pinturas, esculturas, escritos y monedas, etc. todo menos las personas mismas. Valoramos mucho la juventud en su vigor e ideal de belleza, esa juventud que no sabe casi nada y se pregunta casi todo; que fuente de sabiduría estamos perdiendo.

En ocasiones me he sorprendido de conversaciones entre un par de viejos en la calle, en la mesa de al lado del restaurante o el la banca contigua en la plaza, recuerdo algunas cosas todavía, lecciones que aprendí sin buscarlas.

Como sociedad, no los tomamos en cuenta, los desechamos, no les hacemos ningún favor que no sea usufructuar con su dinero y darles una parte. Quizás es porque se debilitan, dejan poco a poco de ser tan lucrativos, tan productivos como antaño y lo primero que se debilita es su oído, quizás porque no lo usan, NO LES PREGUNTAMOS NADA.

El texto anterior lo escribí mediados del 2006, incluso lo había olvidado por completo, ahora me arrepiento. Lo encontré dentro de una vieja croquera que tenía para anotar cosas. Y ahora lo miro con una postura diferente, puesto que, mi abuelo, con el cual vivo desde que nací, sufrió en julio del 2007 cuando iba a cumplir 81 años, un ataque al cerebro, que lo dejo con demencia senil, para mi es horrible la sensación de extrañarlo y tenerlo a lado, hecho de menos sus anécdotas añejas y sus datos freak, conocimientos de historia, su genial lucidez que se apago tan fácil y repentina como una vela con una brisa. Ahora ni siquiera articula frases bien, no hila las palabras y a veces no encuentra el significado o los nombres de las cosas. Honestamente me arrepiento de no haber hablado mas con el o no haber hecho esperar tantas preguntas que se me ocurrieron…

Por ahora trato de llevarme con mi abuela, que es insufrible pero me quiere un montón, y aunque moleste con consejos inservibles y cuidados extremistas, me ayuda en lo que puede.

Aprovechen a sus mayores. Paciencia con ellos que nosotros vamos por el mismo camino.